viernes, abril 30

Pupila dilatada.

Absolutamente perdida entre lo onírico y real. Entre un pueblo y una ciudad. La tierra y el cemento. El lápiz y la birome. Las uñas y un cigarrillo. Una cinta y un pedazo de torta.

007, el juego continúa.

jueves, abril 15

Malparida

Existiendo tantas maravillas en la web escritas, páginas alucinantes con palabras que dicen todo, y yo escribiendo esto (y esto, esto y esto
Quién me manda a juntar un par de ideas aburridas en mi cabeza y darme el impulso de transcribirlas en una página sin sentido alguno, ni siquiera para mi.
En algún momento dude de la existencia de este blog, pero ahora ni siquiera entro en duda: no existe. Pero no porque no tiene gente que "le interesa" (lo que menos quiero es que lean ese par de atrocidades), sino porque no hay razón alguna, ¿para qué?
Practico, lo intento, lo pienso y lo vuelvo a pensar, las escribo y borro mil veces hasta que me doy por vencida y hago un click desilucionada en "Publicar entrada". Ya fue. 
Después de tanto tiempo, pobrecito, no tiene ni un género y menos idea central para catalogarlo como un fracaso, mi fracaso.
El lápiz y el papel, una vez más, no me dan la espalda y me mantienen viva. 
Algunos dicen que escribir es su salvación.
Ahí sí que no hay un Backspace, el error es inrremediable y la única salida es el tachón que le da vida a los textos. Significan que alguien pasó por ahí, alguien estuvo dedicado a leer y leer esas palabras, las pensó y se dio cuenta que tal vez otras serian mejor. Quedan marcadas las lágrimas de un texto triste y las arrugas de la bronca por falta de inspiración.
No seran perfectos, no, no son tan perfectos a simple viste como cualquiera de acá. Alineación correcta, sangría indiscutible, acentos en las letras exactas, mayúsculas, colorcitos y la fotito que hace juego con el título que se estuvo modificando tres horas antes para que encaje exactamente y quede una entrada  armoniosa.
No se confundan, no quiero desprestigiar éste tipo de medios que hoy en día tenemos, y que por cierto, somos muy afortunados de poder utilizarlos y compartirlos. 
El hecho es qué si no me interesa que nadie lea lo que escribo, no me gustan las letras Arial, Verdana, Helvetica y menos Geogia, no quiero tamaño normal ni pequeño, me encantan los renglones, hacer dibujitos alrededor de los agujeros de la hoja, sacar lo que queda roto cuando la arranco del cuaderno, poner la fecha que me gustaría que sea y no la que es, y saber que en mi libro soy la que mejor escribo, nada ni nadie va a darle a esas páginas lo que yo le estoy dando; ¿para qué pretendo algo de ésto y me amargo cuando no sé qué escribir y me frusto y me convenzo de lo bizarro que es, amago a cerrarlo y darle una vuelta de rosca a esta situación? ¿Para qué estoy escribiendo ésta mierda si mira dónde la estoy escribiendo? Qué malparida que soy.
Cuando tome una decision voy a avisarles "interesados". Gracias por el lugar nuevamente.



Última modificación: 21 de Abril de 2010.

domingo, abril 4

Loca de Mierda


Tengo que dejar de ser menos conchuda. Aprender a usar Off. Pensar, pensar que en cualquier  lugar puedo menstruar. Tener un par de pastillas anticonceptivas en mi cajón. Que si una persona fuma no tiene por qué decirme algo porque fumo. Que comerme las uñas hasta sangrar y después pintármelas de azul Bic no es atractivo. Tener en cuenta que mis puntas son un desastre y que en la facultad hace calor. Hablándole a las personas no quedo más conchuda de lo que soy. Animarme a sufrir (un poco) por amor. Dejar de caminar rápido en la calle como si llegara tarde a algún lugar. 

Mis mentiras, ya son verdades. 

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